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Ansiedad

Lo llaman el síndrome de Ulises y le puede pasar a los que aman viajar: conoce de qué se trata

Publicado 3 Abr 2019 – 04:08 PM EDT | Actualizado 4 Abr 2019 – 11:10 AM EDT
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Puede pasarle a los que aman viajar como a los que lo hacen por necesidad. Es que no es ninguna novedad mencionar las condiciones de vida que asumen actualmente las personas que deciden migrar de México a Estados Unidos en un contexto político regido por Donald Trump y una fundamental base antimigratoria.

La inmigración como último recurso trae aparejado (como sucede en otras partes del mundo) el miedo permanente a la deportación y a la detención.

Algunos acontecimientos que ocurrieron en este marco en Estados Unidos hicieron visibles las huellas psicológicas que le significan a las personas ser deportados: lo llaman el «síndrome de Ulises»

El síndrome de Ulises

La psicóloga mexicana Alejandra Rivera publicó un informe en The Conversation en el que analiza el suicidio de un chico de 25 años expulsado de Estados Unidos y teoriza respecto a la condición que sufría como deportado, el «síndrome de Ulises».

En febrero del año 2017 un joven de 25 años (que había sido expulsado de Estados Unidos) se arrojó de un puente en Tijuana, a pocos kilómetros de la frontera entre México y Norteamérica.

A través de este caso la psicóloga explicó que la vulnerabilidad en la salud mental de esta porción poblacional ha ido en aumento con la amenaza de la detención y la deportación.

«Reconozco que el solo hecho de atravesar por el proceso de deportación ya supone un alto nivel de estrés e incertidumbre», expresó Rivera en el informe sobre las causas del síndrome de Ulises y agregó: «El procedimiento implica estar sujeto a un proceso judicial, acudir a audiencias, solicitar y pagar por asesoría legal profesional, y ser retenido y trasladado de un centro de detención a otro hasta finalmente ser expulsado del país»

Para la psicóloga, el migrante (legal o indocumentado) es un sujeto vulnerable per sé alrededor del mundo, incluso sin atravesar ningún procedimiento de deportación. Pasa en las fronteras de México y Estados Unidos, pero también a todo aquel que, con el afán de vivir una «aventura» o probar suerte en otro país, decide emigrar de su tierra.

Y es que para ella, los patrones migratorios están dados en su gran mayoría por los factores sociales, económicos y políticos que las migrantes atraviesan en el lugar de origen.

«En Centroamérica y México se incluyen el crimen, la pobreza y el desempleo. La mayor proporción de migrantes son hombres entre 20 a los 24 años de edad, pero las mujeres también huyen de la violencia que las rodea», explica en el artículo.

Los motivos de la inmigración

Las cifras obtenidas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía de México arrojan que los principales motivos por los que los ciudadanos se van del país están asociados al trabajo, la familia, los estudios y el matrimonio.

Según la misma medición, más del 86% de los mexicanos que emigraron en el año 2014 fue a Estados Unidos, en busca de mejoras laborales y de condiciones de vida.

Para la psicóloga, de acuerdo a las condiciones de esa migración, las personas están expuestas a riesgos psicológicos que pueden repercutir significativamente en su integridad mental.

«El desplazamiento territorial en sí mismo puede ser considerado como un factor estresante, sobre todo si la migración se da en condiciones de incertidumbre y si el migrante no cuenta con una red de apoyo o una comunidad receptora instalada previamente en el país de acogida», explicó la psicóloga.

«El idioma, las diferencias culturales, el nivel educativo, el limitado acceso a servicios y el aislamiento social pueden convertirse en obstáculos que cotidianamente repercutirán en la vida de los migrantes y sus hijos después de llegar», sintetizó.

Pero, ¿ qué es el Síndrome de Ulises?

El síndrome de Ulises: le pasa a los inmigrantes

Los expertos llaman «síndrome de Ulises» a la condición de los migrantes que tiene una especificidad psicosocial por su problemática.

Según los especialistas, los migrantes marginados en su nuevo contexto corren el riesgo de padecer trastornos emocionales y psíquicos de gran magnitud como ansiedad, fatiga y depresión.

«Esta vulnerabilidad se puede manifestar en el uso problemático de sustancias como alcohol y drogas, exacerbando existentes desequilibrios psíquicos», explicó Rivera en el artículo.

Síntomas del síndrome de Ulises

Para dar cuenta si se tiene síndrome de Ulises, hay que atender a los siguientes síntomas emocionales y físicos:

  • Altos niveles de estrés por duelos crónicos e irresueltos
  • El sentimiento constante de fracaso
  • Sensación permanente de soledad
  • Sentimiento de aislamiento social
  • Miedo a ser deportado
  • Fatiga crónica
  • Dolores de cabeza
  • Colitis
  • Gastritis
  • Cansancio

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