Somos emisores y receptores de toda la energía a nuestro alrededor, por lo que siempre estamos en un constante intercambio y rotación de esa vibra y carga vital de nuestro entorno. Es inevitable que vayamos recogiendo algo negativo y carguemos con ella el resto del día. Crédito: Shutterstock
Esta energía influye no sólo en nosotros mismos sino en las personas a nuestro alrededor. Y en este complicado tiempo en que seguimos sufriendo consecuencias de la pandemia, es inevitable sentirnos tristes, deprimidos, cansados... ¿Sabías que las búsquedas en Google de "ansiedad" han subido muchísimo desde 2020? Crédito: Shutterstock
En el ajetreo de nuestra rutina diaria, repleta de preocupaciones y cosas qué hacer, realmente no nos damos el tiempo adecuado para pararnos un momento, hacer un examen de conciencia y ver cómo en realidad algunos de nuestros actos o comportamientos están impulsados por una mala vibra. Crédito: Shutterstock
La buena noticia es que tú mismo tienes el control de algo, y eso es cómo reaccionas. Cuando tu energía o vibra está baja y la sientes tóxica o llena de negatividad, puedes aumentarla de distintas maneras. Al menos podemos poner nuestro granito de arena para no sentirnos tan mal, porque si tú no te ayudas o ves el vaso medio lleno, ¿quién lo hará por ti? Crédito: Shutterstock
Veamos algunos consejos y recomendaciones que podrían ayudarte para recuperar ese bienestar mental, emocional y físico. Elijas la manera que quieras, lo importante es que lo hagas concentrado y te enfoques en querer sentirte mejor. Es un 'wellness' que comienza con uno mismo. Crédito: Shutterstock
Toma un momento para ti mismo. Aunque sean cinco minutos al día, diez, quince, los que puedas. Siéntate en tu rincón favorito, concéntrate en tu respiración, no pienses en tus agobios y encuentra las razones para sonreír y sentirte mejor, que estamos seguros tienes bastantes. Jamás te enfoques en lo negativo, por más que creas que estás en un hoyo profundo. Crédito: Shutterstock
La meditación es básica, aunque no sepamos cómo hacerla, hay ejercicios muy sencillos. Es una práctica milenaria asociada a una sensación de relajación física y tranquilidad interna. Es una forma de despertar la vitalidad, conectarnos con nosotros mismos y encontrar paz interna. Crédito: Shutterstock
No hay nada más poderoso que la música, lo sabemos. Desempolva tu estéreo, tus vinilos, cassetes, CDs, o el moderno Spotify donde encontrarás cientos de artistas. Pon tu artista favorito, tus canciones que te remontan felices memorias. Para una conexión más íntima, ponte audífonos, cierra los ojos y deja que los recuerdos fluyan. Crédito: Shutterstock
Así que además de leer, anímate a escribir. Además de que es un hábito que hemos dejado atrás con la era de las computadoras, puedes hacer tu propio diario, 'journal' o agenda sobre tus pensamientos, lo que hiciste durante el día, tus planes... Te servirá como gran ejercicio de memoria y para releer meses adelante, para recordar dónde estabas cierto día. Crédito: Shutterstock
¡Baila! ¿Hace cuánto no te das un gusto contigo mismo o con tu pareja? Nada como una terapia de baile de unos cinco, diez, 30 minutos... Unos pasos románticos o incluso anímate a algo más movido, como una salsa, merengue, algo que mantenga tu cuerpo en movimiento y sobre todo, tu alma contenta. Crédito: Shutterstock
El que sigamos en pandemia no significa que tenemos que estar 100% encerrados. Aunque es recomendable si no tienes nada qué hacer en la calle, puedes salir a dar una vuelta por tu calle, saca a tu mascota, tomando por supuesto las medidas pertinentes de usar cubrebocas y manteniendo sana distancia. Crédito: Shutterstock
Son unos cuantos consejos que podemos darte para tratar de hacerte sentir mejor. Elige la que más te gusta o busca más opciones en un mar de posibilidades. Tan sólo encuentra algo que te haga sentir mejor - ya sea solo o con alguien más. Deja a un lado tus miedos y encuentra la razón para estar bien contigo mismo y los demás. ¡Ánimo! Crédito: Shutterstock