Justicia ambiental: el enfoque del equipo de Biden que manejará la herencia ecológica que deja Trump
El presidente electo Joe Biden ha puesto a la justicia ambiental como prioridad de su próximo gobierno, con la postulación de Deb Haaland al Departamento del Interior y de Michael Regan a la Agencia de Protección Ambiental (EPA por sus siglas en inglés).
Organizaciones ambientales y líderes indígenas reaccionaron con beneplácito no solamente porque ambas postulaciones marcan precedentes históricos sino porque ambas postulaciones envían el mensaje de que Biden busca hacer hincapié en uno de los postulados principales de su campaña electoral: aplicar la justicia ambiental.
La jefa del Comité Selecto sobre Medio Ambiente de la Cámara de representantes, la demócrata de Florida Kathy Castor, estima que se trata de un “equipo de ensueño” en el tema medioambiental.
“El presidente electo Biden ha ensamblado el gabinete más adelantado en clima de la historia. Con este equipo de ensueño estoy más esperanzada que nunca de que podemos desatar un futuro de energía limpia en EEUU”.
Castor incluye en su lista, además de Haaland y Regan, a la exgobernadora de Michigan Jennifer Granholm como secretaria de Energía, la exdirectora de la EPA Gina McCarthy como primera asesora nacional para el clima o Ali Zaidi como su segundo.
“Estados Unidos tiene una oportunidad increíble de crear trabajos bien pagados, bajos costos para familias y negocios, mejorar la salud pública, y hacerlo de una manera moral y equitativa. La administración Biden trabajará en resolver la crisis climática desde el Día Uno, encabezado por un equipo que verdaderamente se preocupa por hacer un EEUU resiliente y empujar por justicia ambiental”, dice el comunicado.
"Cualquier política ambiental y energética sólida debe promover las oportunidades económicas y de salud pública para todos los estadounidenses en comunidades suburbanas, urbanas y rurales, y reconocer que las comunidades de minorías étnicas y de bajos ingresos han sufrido un impacto desproproporcionadamente alto durante décadas por el cambio climático y contaminantes ambientales", reza la propuesta ambiental que Biden difundió en internet durante su campaña electoral.
Por eso, muchos ven en la inclusión de Haaland, la primera persona indígena que integraría un gabinete presidencial y de Regan, el primer afroestadounidense en dirigir la EPA, un intento de cumplir con esa promesa electoral.
Lo ambiental es un tema que las organizaciones del área consideran de urgente atención, tras cuatro años en los que el gobierno de Donald Trump eliminó o debilitó numerosas protecciones ambientales alegando que el exceso de regulaciones perjudica al sector privado.
Entre las más radicales estuvo el retiro del país del Acuerdo de París contra el Cambio Climático (que se cumplió el pasado noviembre, una vez Trump lo denunció o la autorización para la explotación mineras en zonas protegidas o parques nacionales.
Nueva voz medioambiental
Haaland es una integrante de la etnia Laguna Pueblo, y estaría al frente del ente encargado de velar por el bienestar de los 1,9 millones de indígenas estadounidenses.
Durante los dos años que representó a Nuevo México en la Cámara de Representantes, Haaland integró la comisión para el manejo de recursos naturales.
"Una voz como la mía nunca ha sido secretaria en un gabinete ni dirigido el Departamento del Interior. Haber crecido en el hogar Pueblo de mi madre me hizo fuerte. Seré fuerte para todos nosotros, nuestro planeta, y todas nuestras tierras protegidas", escribió Haaland en Twitter.
Varshini Prakash, director de Sunrise Movement, un grupo que promueve el combate al cambio climático, señaló que "para detener el cambio climático, debemos devolver el liderazgo a las tribus nativas que han cuidado esta tierra durante siglos. Haaland es la opción perfecta, ella es una estrecha aliada de nuestro movimiento que ha luchado por la creación de empleos vinculados a energías renovables".
Prakash recordó que Haaland fue una de las primeras voces en el Congreso a favor del Green New Deal, una propuesta ambiental de la representante Alexandria Ocasio-Cortez y el senador Ed Markey, ambos demócratas.
El Green New Deal es una iniciativa que busca que el gobierno federal elimine en los Estados Unidos el uso de los combustibles fósiles y reduzca las emisiones de gases de efecto invernadero que calientan el planeta en toda la economía. Otro objetivo es asegurar la creación de nuevos puestos de trabajo bien remunerados en las industrias de energía limpia.
Lori Lodes, directora de la organización ambiental Climate Power 2020, dijo que la nominación de Haaland "muestra el fuerte compromiso de Joe Biden con la justicia ambiental y la acción climática audaz".
Por su parte, Regan ejerce como el principal regulador ambiental en Carolina del Norte desde 2017 y allí procuró limpiar toxinas industriales y ayudar a las comunidades de minorías étnicas más golpeadas por la contaminación.
"No tenemos tiempo que perder para enfrentar la crisis climática, proteger nuestro aire y agua potable, y brindar justicia a las comunidades que durante mucho tiempo han soportado la carga de los daños ambientales", dijo Biden el pasado jueves al anunciar que postulará a Haaland y Regan el próximo sábado.
