Biden anuncia reglas que obligarán a las aerolíneas a compensar a viajeros en caso de cancelaciones y retrasos
Para el gobierno de Joe Biden las aerolíneas deben compensar con dinero en efectivo a sus pasajeros cuando cancelan o retrasan significativamente sus vuelos y está preparando un conjunto de nuevas reglas para que así ocurra, siempre y cuando la cancelación o retraso no tenga que ver con causas fuera del control de los transportistas aéreos.
Biden, junto al secretario de Transporte, Pete Buttigieg, dieron detalles el lunes sobre una nueva iniciativa del Departamento de Transporte para garantizar que las aerolíneas que operan en EEUU compensen a sus pasajeros cuando ocurran interrupciones en sus vuelos que estén bajo el control de las compañías, así como para que los pasajeros cuenten con más información sobre sus derechos y sobre lo que la aerolíneas actualmente ofrecen en caso de cancelaciones y retrasos.
Las aerolíneas deberán pagar más que un mero reembolso
Biden anunció la puesta en funcionamiento de un sitio web dependiente del Departamento de Transporte llamado Flight Rights, donde " que muestra un tablero de control creado en el otoño que le da a los pasajeros mayor transparencia sobre las actuales políticas de compensación de la aerolíneas".
El presidente también anunció que "más adelante este año" el gobierno propodrán nuevas reglas de cumpliento obligatorio según las cuales las aerolíneas deberán compensar a los pasajeros por los costos asociados con una cancelación o atraso, incluyendto hoteles, taxis y comidas" cuando el retraso o cancelación haya sido responsabilidad de la aerolínea, además del costo del boleto.
Actualmente las aerolíneas compensan los inconvenientes causados a sus pasajeros con vauchers o cupones y millas en sus programas de viajero frecuente, pero no con pagos en efectivo.
Las reglas vigentes actualmente solo establecen el pago de reembolsos, y se espera que el establecimiento de compensaciones se enfrente a la oposición de la industria de los viajes aéreos.
El departamento de Transporte dará inicio a un proceso para estudiar el problema, así como el establecimiento de una serie de requisitos para que las aerolíneas brindan alimentación, alojamiento y transporte para pasajeros afectados por vuelos cancelados, y ofrezcan un servicio al cliente oportuno durante las interrupciones.
En un comunicado emitido por el departamento de Transporte, Buttigieg explica que “cuando una aerolínea provoca la cancelación o el retraso de un vuelo, los pasajeros no deben pagar la factura”.
El secretario anunció que las nuevas reglas “por primera vez en la historia de EEUU propondría exigir a las aerolíneas que compensen a los pasajeros y cubran gastos como comidas, hoteles y cambios de reserva en los casos en que la aerolínea haya causado una cancelación o un retraso significativo”.
Buscan impedir el caos de altas cancelaciones y retrasos de vuelo visto el verano pasado
La iniciativa gubernamental responde a la demanda por nuevas regulaciones para proteger a los pasajeros causadas por las elevadas tasas de cancelaciones y demoras sufridas el verano pasado.
Según datos del Departamento de Transporte, entre el 1 de junio y el 31 de agosto las aerolíneas cancelaron más de 45,000 vuelos, lo que representa cerca del 2.5% de todos los servicios programados, mientras que más de 413,000 vuelos sufrieron retrasaron de al menos 15 minutos o más, en el mismo período.
El Departamento de Transporte dice que está buscando impedir que se repita una situación similar trabajando con las aerolíneas a fin de reducir las cancelaciones y los retrasos este verano, cuando los viajes aéreos podrían superar los récords previos a la pandemia de coronavirus.
En los últimos años el Departamento de Transporte ha propuesto otros cambios en los reglamentos que rigen el funcionamiento de las aerolíneas como una mayor transparencia en las tarifas y en las reglas que rigen los reembolsos.
El establecimiento de compensaciones podría ayudar a reducir cancelaciones y retrasos
Actualmente la Unión Europea requiere que las aerolíneas compensen a sus pasajeros en efectivo en casos de cancelaciones y demoras.
Estas cancelaciones, que se calculan de acuerdo a una escala sujeta a la duración del vuelo, con montos que superan los 600 euros ($660) para viajes de más de 2,175 millas, han contribuido a una reducción de las demoras, según datos del Departamento de Transporte.
El gobierno aún no ha dado los detalles de la propuesta ni ha proporcionado una fecha estimada de cuándo podrían entrar en vigor las nuevas reglas.
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