Corte permite que inmigrante sindicado erróneamente de pandillero vuelva a pedir asilo
Un inmigrante salvadoreño cuyo caso de asilo fue desestimado por las autoridades de inmigración debido a un informe policíaco que lo sindicaba de pandillero, recibió una nueva oportunidad tras el fallo unánime de un panel de jueces de la Corte de Apelaciones del Primer Circuito en Boston.
El caso fue demandado por la Clínica 'Crimmigration' de la Facultad de Derecho de la Universidad de Harvard en conjunto con abogados del Área de Boston, Massachusetts.
El caso corresponde al inmigrante identificado como Cristian Joshue Díaz-Ortiz, un indocumentado originario de El Salvador quien sostiene que la policía concluyó erróneamente que era miembro de la pandilla MS-13, una clasificación que lo convirtió en deportable e inadmisible en Estados Unidos.
Sin embargo, tanto la Clínica como los abogados que respaldaron el caso lograron convencer recientemente a los jueces de la Corte de Apelaciones del Primer Circuito “para que le den a Díaz-Ortiz otra oportunidad de obtener asilo y para desacreditar el uso de las controvertidas bases de datos municipales de pandillas en trámites migratorios”, dijo la publicación Harvard Law Today.
“Es probable que la decisión de la Corte tenga implicaciones nacionales”, señaló Phil Torrey, director de la clínica Crimmigration.
Qué pasará ahora
Tras el fallo, Díaz-Ortiz tendrá la oportunidad nuevamente de solicurtar asilo en Estados Unidos. “También significa que los jueces de inmigración del Primer Circuito deberán tener cuidado al confiar en los informes de las bases de datos de pandillas de Boston, y de otras ciudades, para evaluar el carácter y la veracidad de los solicitantes”, dice la publicación.
Los abogados del caso señalan además que “estos controvertidos informes, llamados Observaciones de interrogatorio de campo, generalmente están escritos por agentes de policía y son registros de interacciones entre miembros del público u otra evidencia de posible pertenencia a pandillas”.
El director de la Clínica Legal indicó que la mayoría de las personas nunca saben que están incluidas en la base de datos. “No existe ningún mecanismo para salir de ella o incluso paraconfirmar que estás en ella”, precisó.
Torrey también dijo que, peor aún, los informes de policía a menudo están incompletos, sin contexto o simplemente incorrectos y pueden estar sujetos a prejuicios raciales.
Cómo redactan los informes
La publicación del Harvard Law Today indica que los informes de policía sobre pandillas se basan en observaciones policiales subjetivas, a menudo en vecindarios con una gran cantidad de personas de color.
“Y estos otros presuntos miembros de pandillas”, añade Torrey, “podrían haber sido etiquetados incorrectamente en función del mismo sistema de informes defectuoso”.
“Tuve un cliente al que representé que estuvo detenido bajo custodia de inmigración hace cuatro años. No tenía antecedentes penales de ningún tipo, pero estaba bajo custodia en base a uno de estos informes. El departamento de policía de Boston lo había etiquetado como asociado de pandillas porque había acumulado puntos en la base de datos de pandillas por cosas como usar zapatillas Nike negras en un parque”, apuntó.
Díaz-Ortiz también acumuló puntos porque fue visto regularmente en un M.B.T.A., una parada donde la policía sabía que había actividad de pandillas. “El problema es que esa era la parada de T más cercana a su casa y tenía que usarla para ir a dos trabajos diferentes para mantener a su familia”, indicaron los abogados.
Tras la revisión del caso, el panel completo de la Corte de Apelaciones del Primer Circuito estuvo de acuerdo en señalar que los informes policíacos no eran confiables y eran injustos, y los funcionarios de inmigración no deberían haber confiado en ellos para rechazar la solicitud de asilo de Díaz-Ortiz.