null: nullpx
Deportaciones

CBP One "no funciona": organizaciones aseguran que la App crea más obstáculos para pedir asilo

Los grupos argumentan que las personas pueden solicitar asilo independientemente de dónde o cómo crucen la frontera y que la aplicación del gobierno es defectuosa y está creando más obstáculos a quienes buscan gestionar sus solicitudes de asilo.
Publicado 7 Ago 2023 – 09:54 AM EDT | Actualizado 21 Feb 2024 – 02:09 PM EST
Comparte
Cargando Video...

CBP One, la aplicación para teléfonos inteligentes diseñada por el gobierno estadounidense a través de la cual los solicitantes de asilo deben tramitar sus citas para la revisión de sus casos, es una de las principales razones por la que organizaciones defensoras de inmigrantes han demandado al Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras.

La semana pasada una corte de apelaciones de Estados Unidos permitió mantener en vigor la norma que restringe el asilo en la frontera sur, mientras prosigue el litigio contra las medidas implementadas en mayo pasado, tras el fin del Título 42.

Los grupos de derechos humanos presentaron una demanda, alegando que la nueva regla ponía en peligro a los migrantes al dejarlos en el norte de México mientras esperaban para obtener una cita en la aplicación CBP One que el gobierno está utilizando para otorgarles a los migrantes la oportunidad de llegar a la frontera y buscar asilo.

Los grupos argumentan que las personas pueden solicitar asilo independientemente de dónde o cómo crucen la frontera y que la aplicación del gobierno es defectuosa y está creando más obstáculos a quienes buscan gestionar sus solicitudes de asilo.

Nicole Ramos, directora de Al Otro Lado, resalta que “la demanda impugna la política ilegal y la práctica generalizada de la administración actual de exigir una cita previa a través de la aplicación para teléfonos inteligentes CBP One, del gobierno federal, para presentarse en un puerto de entrada y solicitar asilo”.

CBP One se instala en teléfonos inteligentes, costosos para la mayoría de los migrantes

Angelo Guisado, abogado del Centro de Derechos Constitucionales, que forma parte del equipo jurídico que presentó la demanda, señala como la primera gran traba que para instalar la aplicación que los migrantes deben contar con un costoso teléfono inteligente, y aún así, todavía hay problemas técnicos, mensajes de error indescifrables y traducciones erróneas de palabras en inglés.

En la demanda destaca la imposibilidad de programar las citas de migración porque los peticionarios no tienen "smartphones actualizados, wifi, un plan de datos de telefonía móvil o electricidad fiable, todo lo cual es necesario para utilizar CBP One".

"Es incomprensible que un refugiado que acaba de atravesar nueve países con lo que tiene puesto tenga acceso a un teléfono inteligente muy caro", dice Guisado, citado en un reporte de The Guardian.


Guisado dice que los inmigrantes reúnen dinero para comprar teléfonos inteligentes, "todo por una aplicación que no funciona".

La aplicación está disponible en español y criollo haitiano (creole), pero los mensajes de error suelen estar escritos en inglés.

“Incluso en las mejores circunstancias, la aplicación CBP One es notoriamente defectuosa, y su discriminatoria tecnología de reconocimiento facial ha impedido a muchos inmigrantes negros y de piel más oscura obtener una cita”, condenó Nicole Ramos.

La demanda menciona el caso de una mujer nicaragüense con un bebé recién nacido que fue rechazada en la frontera por no haber gestionado su caso a través de la aplicación. Ella le explicó a los agentes que su expareja, miembro de un cartel mexicano, le había roto el teléfono y la amenazó de muerte. Los agentes le respondieron que aún así debía pedir cita a través de CBP One.

"Sabemos que los republicanos pretenden hacer la vida más difícil a todos y cada uno de los pobres, negros o morenos que quieren inmigrar aquí, pero los demócratas están haciendo exactamente lo mismo mientras presentan estas declaraciones que se adhieren a ideales más elevados", manifestó Guisado a The Guardian.

Funcionarios defienden la aplicación porque los trámites son más rápidos

Tras la finalización del Título 42, una política que aplicó Donald Trump en su gobierno durante la pandemia mediante la cual se restringió fuertemente la entrada de inmigrantes a Estados Unidos por razones de salud pública, la administración Biden diseñó una nueva política basada en paroles humanitarios para nacionales de ciertos países y el uso de la aplicación.

El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, declaró en mayo a la CNN que los agentes fronterizos habían registrado un "descenso del 50% en el número de encuentros" en comparación con el movimiento previo al fin del título 42.

Según portavoz de Aduanas y Protección de Fronteras citado por The Guardian, la agencia "está procesando de media entre 4 y 5 veces más migrantes al día en los puertos de entrada de la frontera suroeste que hace una década", por el uso de CBP One.

Las propias directrices del Departamento de Seguridad Nacional señalan que en su trayecto hacia Estados Unidos los inmigrantes se enfrentan a un peligro excepcional, como amenazas de asesinato o secuestro, y en esos casos pueden solicitar asilo sin cita previa.

La activista Ramos denuncia, por el contrario, que las personas que no pueden conseguir una cita con CBP One “son rechazadas ilegalmente y se les niega por completo la oportunidad” de acceder al proceso de asilo de Estados Unidos dejándolos en una situación de vulnerabilidad.

“La ironía es que el Gobierno rechaza a las personas dejándolas varadas en campamentos y albergues en ciudades fronterizas mexicanas que son tan violentas que el propio Departamento de Estado de Estados Unidos limita los viajes de sus empleados en estas regiones”, dijo.

Ramos ha dicho que la demanda sostiene que la política del Gobierno de devolver a los solicitantes de asilo que no tienen una cita CBP One viola la ley de Estados Unidos, la propia orientación del Gobierno, los derechos de los solicitantes de asilo al debido proceso y las obligaciones de Estados Unidos en virtud del derecho internacional, "que prohíbe al Gobierno devolver a los refugiados a países donde se enfrentan a la persecución o la tortura”.

Con información de EFE.

Comparte