Número de cruces ilegales exitosos enciende la alarma dentro y fuera del gobierno de Biden
La entrada a Estados Unidos de unos 600,000 indocumentados que burlaron los sistemas de seguridad en la frontera con México durante el año fiscal 2023 genera serias preocupaciones tanto en el gobierno de Joe Biden como en la oposición del Partido Republicano.
El dato fue revelado por el secretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) Alejandro Mayorkas el martes, duramte una audiencia antre los miembros del Comité de Asuntos Gubernamentales y Seguridad Nacional del Senado.
El jefe de la seguridad nacional de Estados Unidos reconoció, ante un cuestionamiento formulado por el senador republicano Roger Marshall de Kansas, respecto al número de extranjeros que cruzaron ilegalmente la frontera sin ser admitidos y/o procesados, que la cantidad estimada “superó los 600,000".
Mayorkas también aseguró que "el fenómeno de las fugas ha sido un desafío para el DHS durante décadas". Indicó que “de hecho, es un poderoso ejemplo de un sistema de inmigración fallido".
El funcionario también reveló durante la audiencia senatorial que, además, no tenía en ese momento información disponible sobre si un grupo de 169 miembros de la lista de vigilancia terrorista que cruzaron ilegalmente la frontera sur, mencionada por los interrogadores republicanos, se encontraban encarcelados o deportados o habían sido procesados y deportados.
Para los republicanos el no saber con exactitud el paradero de los miles de extranjeros que burlaron los sistemas de entrada es un asunto de seguridad nacional de elevada importancia, sobre todo si entre ellos hay terroristas. "Hablemos de las 169 personas encontradas en la lista de vigilancia terrorista entre los puertos de entrada en el año fiscal 2023", dijo Marshall a Mayorkas. “¿Cuántos fueron deportados?”, “¿Cuántos están encarcelados?”, “¿Cuántos siguen en el país?”, interrogó el legislador.
El secretario del DHS se limitó a responder que revisaría el conjunto de datos de detección de presuntos terroristas y luego entregaría al senador republicano por Kansas las cifras apropiadas.
DHS ratifica datos y reconoce el problema
Tras la audiencia, el DHS dijo a Univision Noticias que el testimonio del secretario Mayorkas “habla por sí solo” y que para analizar la situación en la frontera se debe tomar en cuenta todo el contexto de lo que ha sucedido en los últimos años.
Citando afirmaciones dichas por Mayorkas ante el comité del Senado, la agencia reiteró que “el fenómeno de las escapadas (extranjeros que ingresan de manera indocumentada de manera exitosa burlando los sistemas de control) es algo que ha sido un desafío para el DHS durante décadas”. Y agrega que “de hecho, es un poderoso ejemplo de un sistema de inmigración fallido” o roto, como han mencionado tanto legisladores demócratas como republicanos en diversas ocasiones.
El departamento también refirió las explicaciones dadas por Mayorkas al comité senatorial en cuanto al problema de las fugas. “Estamos viendo una cantidad de personas desplazadas en todo nuestro hemisferio que no tiene precedentes, número uno. Número dos, estamos lidiando con un sistema de inmigración fallido. Número tres, si un individuo representa un riesgo para la seguridad pública, de conformidad con las pautas de cumplimiento que promulgué el 30 de septiembre de 2021, el individuo es una prioridad de cumplimiento (deportación)”, apuntó.
La agencia también reconoce que está operando con un sistema de inmigración “fallido durante décadas”. Y que desde enero de 2021 “hemos enfrentado constantemente aumentos en la migración y desafíos a lo largo de la frontera suroeste”. Simultáneamente, advierte este no es un problema nuevo, y el uso de tecnología, personal y políticas por parte de esta Administración “está garantizando altos niveles de detenciones: más del 70% por ciento en el año fiscal”.
Según el DHS, la tasa promedio de detenciones bajo el gobierno de Biden se ha mantenido idéntica, 77% al promedio de la Administración anterior. “Y estamos trabajando todos los días para invertir en nuestra fuerza laboral y proporcionar los recursos necesarios para reducirla aún más”, indica.
Cruces ilegales o indocumentados exitosos
En enero de 2019 Univision Noticias reportó que, después de una larga discusión sobre los indicadores utilizados por el gobierno de Donald Trump para tener una idea de cuál es la situación real en la frontera, en 2016 se comenzó a utilizar una nueva y más precisa metodología de medición que fue recogida en un Reporte del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) sobre las métricas de seguridad fronteriza publicado en mayo de 2018.
Según ese informe, el número de cruces no detectados había caído casi tan rápidamente como el número de aprehensiones realizadas por la Patrulla Fronteriza en la frontera sur (con México). De 851,000 en el Año Fiscal 2,000, la cifra pasó a 62,000 en el Año Fiscal 2016.
Tres años más tarde, en el Informe del Año Fiscal 2020 del DHS, el último de la presidencia de Trump, el ministerio estimó que, de acuerdo con los datos disponibles sobre entradas ilegales exitosas entre los años 2017 y 2018 experimentaron un incremento. Y que la efectividad por encima del 95% en la capacidad de detención registrada entre los años 2006 y 2016 ( de más de 1 millón a menos de 56,000 por año al final del gobierno de Obama), se estaba revirtiendo.
De acuerdo con el reporte, la metodología utilizada para estimar el ingreso indocumentado exitoso mostró un aumento entre 2017 y 2018, los dos primeros años del gobierno de Trump, de al menos 11 puntos porcentuales con respecto a 2016. Y hasta mediados de 2021 no había datos en cuanto a las estimaciones de cruces ilegales exitosos durante el Año Fiscal 2020, y los datos del Año Fiscal 2021 se conocieron hasta después del primer trimestre de 2022. Pero la proyección apuntaba a que los números aumentaron durante el gobierno anterior a pesar de la vigencia de la política migratoria de ‘tolerancia cero’, datos que los republicanos y Trump no mencionan en sus ataques a la política migratoria de Biden.
Qué dice ahora el DHS de los cruces ilegales
En respuesta a una pregunta enviada por Univision Noticias, el DHS dijo que antes de 2013, “la mayoría de los extranjeros que intentaban cruzar la frontera entraban sin ser descubiertos (cruces indocumentados o ilegales exitosos). Y que según sus estadísticas, el número estimado de entradas ilegales entre los años fiscales 2006-2009 “superó el número estimado en 2021”.
“El DHS estima que hubo un total de 660,000 entradas ilegales en 2021, en comparación con 1,77 millones en el Año Fiscal 2006”, precisa. No detalla por qué y cómo aumentó la cantidad de entradas ilegales exitosas entre 2018 y 2021.
Añade la respuesta que “las mejoras en la tasa de detenciones en la frontera estimada por la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo (CBP) han hecho que el número estimado de entradas sin inspección sea mucho más bajo que los máximos anteriores a principios de la década de 2000”. Y agrega que “la tasa estimada de detenciones en la frontera promedió más del 70% entre 2018 y 2021, en comparación con el 35% entre los años fiscales 2002 y 2004”.
El DHS también resaltó la importante de considerar la capacidad de respuesta de sus agentes en la frontera con México, a pesar de la necesidad de nuevos recursos para mejorar la infraestructura operativa. “En general, en el año fiscal 2021 hubo 1.72 millones de encuentros con la Oficina de Aduanas y Control Fronterizo (CBP) que resultaron en la deportación o expulsión bajo la Autoridad del Título 42 de Salud Pública de los Centros para el Control de las Enfermedades (CDC) o en procesamiento como casos de aplicación de la ley de inmigración bajo el Título 8”.
La data re3vela además que el DHS completó 1.2 millones de repatriaciones, incluidas expulsiones en virtud del Título 42 y expulsiones en virtud del Título 8, “lo que representa más de dos veces y media más repatriaciones que en el año fiscal 2020”. Y en el año fiscal 2022, “más personas encontradas en la frontera fueron expulsadas bajo el Título 8 o el Título 42 que en cualquier año anterior (1.4 millones de personas)”, dato que evidencia el incremento de un flujo migratorio que, a pesar de las políticas de disuasión, en vez de disminuir se mantiene y al mismo tiempo crece.
“Desde mayo de 2023 el DHS ha expulsado o devuelto a más de 336,000 extranjeros que no tenían una base legal para permanecer en Estados Unidos, incluidos más de 50,000 miembros de unidades familiares individuales”, se lee en el informe enviado por el ministerio a Univision Noticias.
El último pedido urgente de Biden al Congreso
La tercera semana de octubre la Casa Blanca anunció que Biden envió una solicitud al Congreso para que apruebe una partida presupuestaria urgente de más $14,000 millones para la frontera con México, fondos que serán utilizados, entre otros rubros, para la contratación de nuevos agentes federales, combate al narcotráfico y el tráfico de personas, deportaciones y compra de tecnología de avanzada para aumentar la vigilancia en los puertos de entrada y disminuir el cruce indocumentado o ilegal exitoso.
En el documento de la Casa Blanca se especifica que “unos 1,300 agentes de la patrulla fronteriza adicionales trabajarán junto con los 20,200 agentes ya financiados en el presupuesto del año fiscal 2024”.
De inmediato organizaciones que defienden los derechos de los inmigrantes y de derechos civiles alzaron sus voces y pidieron a Biden que los fondos solicitados al Congreso con carácter de urgencia no solo se destinen en asuntos de seguridad nacional y deportaciones, sino también para restaurar el proceso de asilo.
Entre ellos, la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), dijo que partes de este financiamiento de $14.000 millones para la frontera deberían “apoyar los servicios humanitarios y en otras ciudades fronterizas que trabajan para recibir migrantes”.
También pidió al gobierno invertir en la reducción de los “retrasos en los permisos de autorización de empleo para migrantes y solicitantes de asilo”, atasco que bordea las 500,000 solicitudes hechas a la Oficina de Ciudadanía y Servicios de Inmigración (USCIS) por medio del formulario I-765.
ACLU dijo que la solicitud complementaria “también describe una financiación significativa para agentes de la patrulla fronteriza adicionales y la ampliación de la detención de inmigrantes”, una preocupación constante que amenaza con debilitar aún más el debido proceso migratorio.
Entre las sugerencias enviadas por la Casa Blanca al Congreso, se incluyen:
- Aumentar el número de agentes de asilo y jueces de inmigración adicionales para juzgar y resolver casos de asilo;
- Dedicar más inversiones a ciudades, estados y comunidades en la frontera y en todo el país para albergar, acomodar e incorporar a nuevos inmigrantes más fácilmente;
- Incrementar el presupuesto de USCIS para procesar solicitudes de permisos de trabajo para que las personas trabajen ayudando a construir la economía y cubrir la escasez de mano de obra;
- Ampliar la capacidad en los puertos de entrada para procesar a los solicitantes de asilo de manera segura y al mismo tiempo aumentar nuestra capacidad para detectar e interceptar el contrabando peligroso, incluido el fentanilo.
El DHS que continuará administrando las fronteras “de una manera segura y humana, aprovechando vías legales ampliadas con consecuencias más duras para abordar la migración irregular que estamos experimentando en todo el hemisferio”.
Nota:
Las estimaciones de cruces indocumentados o ilegales exitosos mencionados por el DHS no incluyen aquellos cruces exitosos no detectados por los sistemas de seguridad electrónicos instalados en la frontera con México.
