La 'ruta VIP' y sus peligros: migrantes pagan a los traficantes para ir en botes y evitar la selva del Darién
Once inmigrantes de nacionalidad china fueron rescatados la semana pasada en un bote en aguas panameñas donde traficantes de personas los abandonaron a su suerte. Apartentemente hacían una 'ruta VIP' por vía marítima para evitar el peligroso paso a pie por la selva del Darién y por la que pagan mucho dinero.
Se trata de una práctica cada vez más frecuente que lleva meses siendo documentada por autoridades de Panamá y de Colombia, de donde suelen salir las embarcaciones.
La Procuraduría General de Colombia ha identificado hasta cinco diferentes 'rutas VIP' que parten del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, en el Caribe colombiano, que usan las redes criminales utilizan para el tráfico de personas por su ubicación geoestratégica.
La 'ruta VIP' es "un puente para llegar más rápido a países como Nicaragua, para luego continuar a México y terminar como destino final a Estados Unidos", indica un informe de la misma dependencia colombiana presentado a principios del mes pasado.
“Existen empresas legalmente constituidas, dedicadas a operaciones de turismo que ofrecen 'paquetes turísticos' dirigidos a la población migrante, para que emprendan su ruta hacia el norte del continente”, añade el reporte.
Un viaje costoso y riesgoso para evitar la Selva del Darién
El paso por el Caribe panameño, a través de la 'ruta VIP', ha sido utilizado con frecuencia por migrantes de nacionalidad china, pero la Procuraduría colombian ha identificado también a ciudadanos de hasta 12 países, entre los que se encuentran Bangladesh, Uzbequistán, Vietnam, Nepal, Bielorrusia, Bosnia, Perú y Venezuela.
Los inmigrantes chinos hallados el pasado domingo fueron interceptados por fuerzas de seguridad panameñas en la zona de La Ensenada de Caledonia en Guna Yala. En otro bote llevaban 17 maletas de equipaje.
"Dos sospechosos que transportaban a estas personas, huyeron, dejando a la deriva a los migrantes", dijo el Ministerio de Seguridad Pública panameño en su cuenta de X.
Reinel Serrano, jefe de la Primera Brigada oriental del Servicio Nacional de Fronteras de Panamá en la provincia de Darién, explicó en septiembre a la agencia EFE que para optar por la ruta marítima los migrantes pagan a los coyotes unos $1,200 por persona, mientras que el costo por la selva es de entre $80 y $180. Pero en el Tapón del Darién el pago no les garantiza librarse de robos, violaciones, ataques de animales salvajes o la crecida de ríos.
Según el Ministerio Público colombiano, los traficantes pueden llegar a cobrar hasta $4,000 por persona, dependiendo de la ruta. El viaje se hace en "embarcaciones que violan condiciones mínimas de seguridad y la normatividad marítima vigente, con riesgo de naufragios".
Serrano dice que los inmigrantes, después de desembarcar los sacan de la costa en caballos y vehículos. En todas las operaciones que han realizado en Panamá solo han interceptado a personas de nacionalidad china", refirió Serrano.
Panamá registra a los migrantes a su llegada a las poblaciones indígenas a la salida de la selva o en los centros de recepción migratoria donde les dan cobijo y alimento, para luego coordinar la salida en autobuses hasta Costa Rica, un desplazamiento que se deben costear ellos mismos.
Dilan Wiell Pomare, un pescador colombiano de Cayo Pescador, una pequeña isla entre Colombia y Nicaragua citado en un reporte de La Voz de América, afirma que los traficantes mucas veces abandonan a los inmigrantes.
“Los traficantes dejan a los migrantes acá, tirados, les dicen que esto es Nicaragua, les quitan la plata y los abandonan. Nosotros les ayudamos para sobrevivir mientras tienen cómo devolverse a San Andrés en alguna embarcación de turistas”, contó Wiell.
Aumenta la migración de ciudadanos chinos que usan las 'rutas VIP'
La Procuraduría colombiana dijo en su informe de octubre que los traficantes de personas les ofrecen viajar en avión desde Cali, Medellín, Cartagena y Bogotá hasta el aeropuerto de San Andrés.
“Luego de pasar una noche en la isla, las redes los embarcan en una peligrosa travesía por mar abierto, haciendo transbordo en los cayos Albuquerque y Pescador, al sur del archipiélago para llegar a Nicaragua en su tránsito hacia Estados Unidos”, detalla el informe.
Según un reportaje del diario colombiano El Tiempo, el número de inmigrantes de nacionalidad china que se ha detectado en Necoclí, Antióquia, muy cerca de Panamá, constituye una minoría, en comparación con haitianos y venezolanos, pero ha ido en aumento.
El gobierno panameño ha registrado más de 1,300 migrantes chinos que cruzaron el Darién en 2022, el triple de los 10 años anteriores.
En Necoclí, dice el reporte de El Tiempo, los comerciantes reciben a los inmigrantes chinos con los brazos abiertos porque compran con dólares o tarjetas de crédito, usan sus iPhones para traducir y son extremadamente reservados.
La Procuraduría colombiana advierte que sobre los peligros a los que se exponen los migrantes que usan la 'ruta VIP' marítima, como la exposición de hasta 15 horas en altamar, para evitar ser descubiertos por las autoridades, así como el riesgo de enfrentarse a 'embarcaciones piratas', que los podrían interceptar para robar sus pertenencias.
“Es altamente probable el naufragio de las embarcaciones, toda vez que sus características (un solo motor, tamaño pequeño y sobrecupo) limita su capacidad para resistir las olas de hasta dos y tres metros que pueden enfrentar al navegar”, destaca el informe.
Entre 2022 y 2023 han sido rescatados en altamar al menos 977 inmigrantes que se dirigían hacia costas nicaragüenses; este año se han registrado seis naufragios en esas rutas, indica un reporte de la Radio Nacional de Colombia.
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