Bermuda: cómo una isla tranquila se convirtió en un paraíso financiero
HAMILTON, Bermuda. - Recogiendo algas en la playa temprano una mañana reciente, Omer Velassa, de 78 años, recordó su infancia cuando Bermuda era una comunidad agrícola tranquila.
Eso fue antes de que llegaran los hoteles de lujo y la industria financiera extraterritorial.
Él todavía cuida su jardín, cultivando papas. "El progreso viene con una maldición", dijo con un toque de melancolía. "No me malinterpreten, la industria offshore ha creado algunos puestos de trabajo. Pero podría hacerse de manera más equitativa ".
Asentada a unas 700 millas de la costa atlántica de los Estados Unidos, la pequeña isla británica aparece en los mapas como un punto luminoso en el océano.
Con solo 20 millas cuadradas y con 65,000 habitantes, es conocida por la mayoría de las personas por los coloridos shorts Bermuda y, por supuesto, el mítico ‘triángulo de las Bermudas’ donde desaparecen aviones y barcos.
Pero, detrás de su aspecto relajado, es también donde el dinero llega a desaparecer, al menos del alcance del recaudador de impuestos.
"Aquí tenemos una economía simple", dijo el exministro de Finanzas Bob Richards. "Nunca hemos tenido la necesidad de impuestos sobre la renta ... por lo tanto, alguien tuvo la brillante idea de que, si configura una empresa en Bermuda, no tendrá que pagar este impuesto sobre la renta, podría ser beneficioso".
La gestión de la riqueza transfronteriza estuvo dominada durante muchos años por Suiza, pero desde la década de 1980 muchos nuevos actores han ingresado al mercado, desde Bahamas a Hong Kong. Hoy, Bermuda es una de las economías más exitosas del mundo con un PBI per cápita (Producto Interno bruto) de 96,000 dólares.
Su papel en las finanzas offshore ha sido objeto de escrutinio después de una filtración masiva de documentos de una de sus principales firmas de abogados, Appleby. Una examinación de los documentos por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ) revela cómo las exenciones de impuestos de Bermuda son explotadas por personas adineradas y corporaciones multinacionales, como Nike y Apple, para evitar pagar miles de millones en impuestos.
Estados Unidos pierde 100,000 millones cada año debido a elusiones y evasiones impositivas, tanto legales como ilegales, según el Servicio de Investigación del Congreso.
Un estudio reciente mostró que las 500 principales empresas estadounidenses tienen ganancias de 2.6 billones de dólares en el extranjero ('trillion' en inglés), lo que evita 752,000 millones de dólares en impuestos a Estados Unidos. Otro estudio encontró que el equivalente de al menos 10% del PBI mundial está en bancos extraterritoriales.
Una rica historia
Nombrado por el capitán español Juan de Bermúdez, que aterrizó allí en 1503, Bermuda tiene una orgullosa tradición democrática que cuenta con el parlamento más antiguo del hemisferio occidental. Durante la Revolución Estadounidense, Bermuda ayudó al general George Washington a suministrarle pólvora.
Más tarde, Bermuda ayudó a los británicos a despedir a Washington DC en 1814, incendiando la Casa Blanca en el proceso.
Durante ambas Guerras Mundiales sirvió como una importante base militar para la Fuerza Aérea de EEUU, protegiendo rutas marítimas vitales de los británicos a través del Atlántico frente al ataque alemán.
Su industria de seguros despegó después de que el huracán Andrew azotara a Florida en 1992, eliminando a varias compañías de Estados Unidos. "De repente, no había capacidad para asegurar grandes daños por huracanes en los Estados Unidos. Ninguna. Y respondimos a la necesidad ", dijo Richards.
Los ataques del 11 de septiembre en Nueva York crearon aún más estrés en los mercados de seguros. Bermuda es ahora la sede de 13 de las 40 reaseguradoras más importantes del mundo, lo que lo convierte en el segundo mercado de reaseguros más grande del planeta. Ningún otro país tiene un mayor porcentaje de actuarios y contadores entre su población.
Paraíso fiscal, ¿o no?
Bermuda rechaza vehementemente la etiqueta peyorativa de 'paraíso fiscal' y en su lugar le gusta pensar en sí misma como un mercado financiero de primera línea con altos estándares regulatorios, ofreciendo a los clientes soluciones legítimas para reducir su carga impositiva.
Si bien Bermuda sí disfruta de una de las mejores reputaciones en la industria offshore, su afirmación de que no es un paraíso fiscal es "absurdo", dice David Marchant, editor de Offshore Alert, una entidad de control independiente de la industria.
"Las empresas de propiedad extranjera en las Bermudas son conocidas como compañías exentas. Y la palabra ‘exenta’ literalmente significa que están exentos de impuestos. Bueno, si estás exento de impuestos, por supuesto que eres un paraíso fiscal ", dijo.
Marchant pasó cinco años trabajando en Bermuda en la década de 1990 exponiendo fallas en su régimen offshore. Se fue después de que su permiso de trabajo no fuera renovado.
Marchant compara los esfuerzos para regular la industria offshore con un juego de gato y ratón.“Durante los últimos 10 a 15 años, el gato se ha vuelto más decidido a atrapar al ratón, pero es como una caricatura de Tom y Jerry. El mundo offshore es el ratón, el gato es el mundo terrestre, y como todos sabemos por Tom y Jerry, al gato normalmente lo golpean en la cabeza y lo explotan, y generalmente te hace ver ridículo."
Regulación, con un toque suave
El principal organismo regulador de la isla, la Autoridad Monetaria de Bermuda, supervisa el sector empresarial extraterritorial. "Nuestro regulador es reconocido como un líder en cumplimiento", dijo la vocera de BMA, Rosemary Jones, a Univision Noticias, socio de ICIJ, en un comunicado. "El secreto no es una palabra asociada con Bermuda por aquellos que conocen bien este mercado. En resumen, no es un lugar donde la gente viene a esconder dinero, y las autoridades fiscales en el extranjero saben que Bermuda coopera de buena gana y es muy diferente de muchos otros países.”
Puede verse bien en papel, pero Marchant cuestiona qué tan efectivo es en la práctica. "Están regulados, pero una de las razones para irse a la costa en primer lugar es que la regulación es con un toque muy ligero. Ese es uno de los principales beneficios de crear una compañía offshore", dijo.
Por ejemplo, Bermuda mantiene un registro de todos los propietarios reales de las empresas, pero no es público. "La información que tenemos es información privada. Si hay una consulta legítima de otro gobierno, la compartiremos con ellos. Pero no vamos a compartirlo con cualquier 'fulano' de tal que simplemente ... quieran averiguar sobre el negocio de un señor", dijo Richards.
Bill Zuill, exeditor del periódico Royal Gazette, dice que confía en los esfuerzos de cumplimiento del sector offshore de Bermuda. "Entendemos muy bien lo importante que es la reputación. Es lo único que realmente tenemos que negociar, es algo difícil de conseguir y es mucho más difícil de recuperar si lo pierdes ", dijo.
Pero, reconoce que hay margen de mejora. "No hay duda de que el cumplimiento es una de las industrias de crecimiento mundial. Pero no hay duda de que hay más que vienen todo el tiempo y hay que seguir mejorando ", dijo.
Zuill argumenta que las compañías extraterritoriales han sido buenas para la isla, señalando su generosidad a las organizaciones benéficas locales, incluido el Bermuda National Trust, un grupo ambiental e histórico, que encabeza.
Sin embargo , una encuesta del mes pasado descubrió que menos de la mitad de los residentes de Bermudas consideraba que la isla era "inclusiva" y se quejaba del costo de la vivienda.
El sistema impositivo de Bermudas está produciendo pobreza en la isla, según el economista local Robert Stubbs, exjefe de investigación del Banco de Bermuda. "Desafortunadamente, tenemos que aumentar nuestros impuestos para aquellos que pueden pagarlo y se les paga más para dar alivio tributario a aquellos que se encuentran en circunstancias difíciles", dijo Stubbs en una reunión pequeña en septiembre.
Pero no espere que Bermuda cambie sus leyes de confidencialidad pronto.
"No creo que vamos a tener un impuesto sobre la renta personal o corporativo en Bermuda", dijo Richards. "Pero si el Reino Unido o Francia quieren gravarlos. Bienvenidos sean".
En la bella tranquilidad de la playa de Horseshoe Bay, Omer Velassa explica que las algas marinas mantienen ayudan a controlar las malas hierbas y los caracoles en su jardín.
Dice que no está convencido de que las compañías offshore sean buenas para la imagen de la isla y sus residentes.
"No es ningún secreto, vienen por el dinero". Es por eso que están aquí, para aprovechar el sistema de impuestos. Y se vuelve cada vez más caro para el resto de nosotros ".
