Chicago será sede de la Convención Demócrata del 2024, donde Biden buscará ser nominado a la reelección
Los demócratas eligieron Chicago como sede de su convención nacional de 2024, tratando de mantener el impulso del partido tras el éxito de las elecciones de mitad de mandato del otoño pasado en el Medio Oeste, una zona crítica para ganar la presidencia.
La decisión, confirmada por un funcionario demócrata que habló a la agencia de noticias AP este martes bajo condición de anonimato antes de un anuncio oficial, se produce después de que el presidente Joe Biden eligiera a Chicago entre las ciudades finalistas para organizar el evento, que también incluían a Atlanta y Nueva York.
Chicago es sólidamente demócrata, al igual que el resto del estado de Illinois. Pero celebrar la reunión de nominación presidencial del partido en una ciudad tan favorable a los sindicatos busca demostrar el compromiso de Biden con el trabajo organizado, que será fundamental para su intento de ganar un segundo mandato en la Casa Blanca.
La medida también podría contrarrestar a los republicanos, que el verano pasado decidieron celebrar su convención de 2024 en Milwaukee, en otro estado crítico del medio oeste, Wisconsin.
Milwaukee, la convención demócrata que no fue por culpa del coronavirus
Se suponía que la convención demócrata de 2020 se celebraría en Milwaukee, pero se desarrolló virtualmente debido a la pandemia de coronavirus. Biden pronunció un discurso aceptando la nominación de su partido ese año en un centro de convenciones casi vacío en Wilmington, Delaware, donde tiene una casa y a menudo pasa los fines de semana lejos de la Casa Blanca.
Milwaukee, sin embargo, usó sus preparativos para la convención de 2020 para argumentar a los republicanos que tenía una operación "llave en mano" lista para el próximo año.
Chicago fue sede de la convención demócrata de 1968, que se recuerda por los choques que se produjeron entre la policía y los manifestantes que se oponían a la guerra de Vietnam. La última Convención Nacional Demócrata en la ciudad fue en 1996, cuando el presidente Bill Clinton ganó un segundo mandato.
El gobernador demócrata de Illinois, J. B. Pritzker, fue una voz clave en el cabildeo por Chicago. Señaló los deseos demócratas de expandir sus ganancias electorales en el Medio Oeste, particularmente en Michigan, donde el partido ocupó la gobernación y ganó el control de ambas cámaras de la Legislatura durante las elecciones intermedias del otoño pasado.
No obstante, que Chicago venciera a Atlanta fue una sorpresa dada la importancia estratégica de Georgia como estado clave. Biden ganó Georgia hace dos años, convirtiéndose en el primer demócrata en hacerlo en una elección presidencial desde Clinton en 1992, y su partido ahora controla sus dos escaños en el Senado después de victorias que llamaron la atención nacional en los últimos dos ciclos.
Aunque Atlanta es tan demócrata como Chicago y Nueva York, Georgia bien podría ser un factor decisivo importante en la carrera presidencial de 2024.
Evitar a Atlanta para la convención podría ser un doble golpe para Georgia, que eventualmente también puede perder su primer lugar en un nuevo calendario de primarias demócratas.
Cambios en el orden de las elecciones primarias demócratas para 2024
Biden respaldó mover a Georgia a la posición número 4 en un calendario primario demócrata renovado para 2024, cambios destinados a empoderar mejor a la base de votantes profundamente diversa del partido que el antiguo sistema, que comenzó con Iowa abrumadoramente blanco.
Bajo una nueva orden primaria aprobada por el Comité Nacional Demócrata en marzo, Georgia habría ido después de Carolina del Sur, y seguiría a Nevada y New Hampshire, que iban en segundo lugar simultáneamente. Estaba programado antes de Michigan, un nuevo estado primario demócrata temprano en el número 5.
Esos cinco primeros tendrían la oportunidad de votar antes que gran parte del resto del país, el Súper Martes a principios de marzo.
Sin embargo, Georgia podría ser despojada del cuarto lugar, ya que los funcionarios estatales republicanos se han negado a pasar a una fecha anterior que no coincida con las primarias presidenciales del Partido Republicano el próximo año. Asegurar la convención podría haber suavizado el golpe de verse obligado a salir de la alineación inicial de las primarias, pero no fue así.
Mientras busca la reelección, el presidente ya está enfocado en las elecciones generales de 2024, en lugar de las primarias, y enfrenta solo una oposición simbólica de la retadora demócrata, Marianne Williamson, asesora espiritual y autora, y activista contra las vacunas Robert F. Kennedy Jr.
