Masacre en Texas: vio por cámaras de vigilancia a un intruso en su casa que luego mató a su esposa e hija
El pasado martes una trágica secuencia de actos violentos en Austin y San Antonio dejó un saldo de seis muertos, varios heridos y el sospechoso detenido.
Los fallecidos por heridas de bala fueron hallados en dos viviendas en Austin y una en el este de San Antonio. Las dos primeras víctimas, en la vivienda de San Antonio, fueron los propios padres del atacante, identificado como Shane James, de 34 años, quien fue oficial de infantería del Ejército durante dos años.
Uno de estos episodios de violencia presuntamente perpetrados por James en Austin fue captado por el sistema de vigilancia de una vivienda. Documentos del caso detallan como al momento, mientras ocurría, el dueño de la casa, que no estaba allí, pudo ver al hombre armado patear la puerta trasera y entrar a la vivienda, en donde estaban su esposa y su hija, que según dijo, tenía "necesidades especiales".
El hombre enseguida llamó a la policía para que acudiera a su hogar, ubicado en Austral Loop, en el suroeste de Austin, pero fue demasiado tarde. Katherine Short, de 56 años, y Lauren Short, de 30, fueron halladas en la casa con heridas de bala y declaradas muertas en el lugar a las 7:30 pm, de acuerdo con la declaración jurada, a la que tuvo acceso el canal WOAI-TV, filial de NBC.
Cuando los agentes llegaron confrontaron al sospechoso, quien disparó en varias ocasiones y llegó a herir a un policía. Luego robó un auto Acura de la vivienda y huyó, desatando una persecución a gran velocidad que finalmente terminó cuando el sospechoso estrelló el auto y fue arrestado. Llevaba una pistola y cargadores.
De acuerdo con la orden de registro obtenida por WOAI-TV, la policía de Austin estaba tratando de obtener muestras de ADN como evidencia de la responsabilidad de Shane James en los asesinatos de la vivienda de Austral Loop, Austin.
Las otras dos víctimas, asesinadas en otra vivienda al sur de Austin, fueron identificadas como Emmanuel Pop Ba, de 32 años, declarado muerto en el lugar, y Sabrina Rahman, de 24, que murió en el hospital.
No está claro qué relación -de existir alguna- podría haber entre James y las otras cuatro personas a las que presuntamente asesinó, además de sus padres. Enfrenta cargos preliminares de asesinato capital de múltiples personas y asesinato capital por amenaza terrorista u otro delito grave, que podrían castigarse con la pena de muerte. Su audiencia está programada para el 18 de enero.
Quién es Shane James
James fue oficial de infantería del Ejército entre 2013 y 2015, según reportes, y al parecer su salida del cuerpo armado tuvo que ver con un episodio de violencia doméstica.
El hombre era conocido por las autoridades del condado de Bexar, en donde vivía su familia, ya que a principios del año pasado fue arrestado por tres delitos menores de agresión por atacar a sus padres y su hermano en la casa familiar, según documentos judiciales citados por WOAI-TV.
Sin embargo, Texas Organizing Project (TOP), una organización sin fines de lucro que apoya a los acusados estatales que no pueden pagar una fianza, ayudó a James a pagar la suya, de $300, por lo que consiguió salir de la cárcel.
"Queremos dejar claro que TOP cuenta con un proceso de selección minucioso y riguroso para evaluar a las personas que son elegibles para nuestro programa de fianza, con un enfoque en ayudar con delitos menores", dijo la organización en un comunicado esta semana, tras conocerse los trágicos hechos. "James fue considerado elegible según nuestros criterios en ese momento", agregó.
Tras ser liberado el año pasado, James se cortó el monitor que le pusieron en el tobillo. En esos momentos, la ley todavía no había cambiado y cortarse un monitor de tobillo era solo una violación de la libertad condicional. Actualmente eso podría penarse hasta con dos años de cárcel.
Pero en agosto de este año, la policía volvió a acudir a casa de los padres de James por alteraciones en su conducta. Según contó en conferencia de prensa el sheriff del condado de Bexar, en esa ocasión James se atrincheró en un dormitorio y gritó insultos raciales y otros a los policías.
Sin embargo, aunque el padre de James forzó la puerta para abrirla parcialmente, los agentes se marcharon sin detener a James y le pidieron a la familia que los llamara cuando él saliera, para arrestarlo, pero nunca recibieron esa llamada.
Según el sheriff, el hombre estaba teniendo una crisis de salud mental y los agentes también evitaron tener contacto físicon con él, ya que estaba desnudo, y hasta el momento solo había tenido delitos menores.
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