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Detector de Mentiras

Trump repite acusaciones de corrupción engañosas y sin evidencias sobre Joe Biden y su hijo

¿Se benefició Hunter Biden, mientras estaba en la junta directiva la empresa ucraniana Burisma, de la posición de su papá como vicepresidente? ¿Presionó Joe Biden al gobierno ucraniano para destituir al fiscal general y beneficiar a su hijo? ¿Recibió Hunter Biden $3.5 millones de la empresaria rusa Elena Baturina? ¿Cuánto dinero ganó Hunter Biden en Burisma? Aquí lo revisamos
15 Oct 2020 – 12:03 PM EDT
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El exvicepresidente Joe Biden y su hijo menor Hunter. Crédito: Teresa Kroeger

El presidente Donald Trump repitió en un mitin en Des Moines, Iowa, las acusaciones de corrupción contra Hunter Biden, el hijo menor del candidato demócrata, Joe Biden. Esta vez se basó en un artículo de The New York Post. “Joe Biden ha estado mintiendo descaradamente sobre su participación en los negocios corruptos de su hijo”, dijo Trump, sin mostrar evidencias de ello.

Ya en el primer debate presidencial, el 29 de septiembre, el presidente Trump había hecho varias afirmaciones sin pruebas sobre este caso. Seis días antes, los senadores republicanos Ron Johnson y Chuck Grassley habían hecho pública su investigación sobre los Biden y Ucrania.

El informe no mostró evidencias de que la posición de Hunter Biden en la empresa ucraniana Burisma, mientras su padre hacía gestiones en Ucrania como vicepresidente, hubiera incidido en la política de Estados Unidos hacia ese país.

En el debate, sin embargo, Trump echó mano de varias aseveraciones del informe para insistir en el tema delante de su competidor en la carrera electoral.

Aquí verificamos las declaraciones y mensajes más recurrentes sobre este caso.

¿Recibió Hunter Biden, dentro de la junta directiva de Burisma, favores del Departamento de Estado para esa compañía ucraniana, mientras su padre Joe Biden era vicepresidente y hacía gestiones de parte de Estados Unidos en Ucrania?

No hay evidencias de esto, ni en en el informe de los dos senadores republicanos, la investigación oficial más reciente sobre el tema, ni en las declaraciones del alto funcionario del Departamento de Estado al que la investigación alude.

El informe, con la autoría de los senadores republicanos Ron Johnson y Chuck Grassley (de los comités de Seguridad Interna y de Finanzas del Senado), que se presentó el 23 de septiembre pasado, reitera informaciones que salieron en el juicio político a Donald Trump del otoño de 2019: que funcionarios del Departamento de Estado se sintieron incómodos por un posible conflicto de intereses debido a la posición de Hunter Biden en la junta directiva de Burisma -la compañía de gas ucraniana para la que trabajó entre 2014 y 2019-, mientras su padre, como vicepresidente, hacía gestiones de parte de Estados Unidos en el conflicto en Ucrania y con su joven gobierno, que lideraba el presidente Petro Poroshenko. Poroshenko quedó electo como presidente tras el derrocamiento de Viktor Yanukovych en 2014.

Sin embargo, la investigación de los senadores no pudo comprobar si la posición de Hunter Biden en Burisma, como dice textualmente su informe, “afectó la política de Estados Unidos hacia Ucrania”.

“El alcance de cuánto afectó el papel de Hunter Biden en la junta directiva de Burisma a la política de Estados Unidos hacia Ucrania no está claro. Lo que está claro de los archivos, sin embargo, es que funcionarios del Departamento de Estado, particularmente [George] Kent, consideraron con frecuencia que la conexión de Hunter Biden con Burisma podría afectar la ejecución de la política de Estados Unidos”, se lee en una parte del documento de 87 páginas.

Pero la información sobre la inconformidad de funcionarios del Departamento de Estado con la presencia del hijo de Biden en Burisma ya se había revelado durante el juicio político a Trump. Kent, un alto funcionario del Departamente de Estado, lo dijo en su testimonio durante las audiencias públicas del juicio político, en noviembre de 2019. Cuando supo que Hunter Biden estaba en la directiva de Burisma, testificó Kent, mostró su preocupación al personal de seguridad nacional de la oficina del vicepresidente Biden de que la posición de su hijo en esa empresa podría crear “la percepción de un conflicto de intereses”. Kent expresó esa inquietud en una reunión informativa de febrero de 2015, pero no le prestaron atención, insiste la investigación de los senadores de septiembre de este año, algo que también ya se había publicado el año pasado.

El informe de Johnson y Grassley cita un email que envió Kent a otros altos funcionarios del Departamento de Estado en septiembre de 2016: “La presencia de Hunter Biden en la junta directiva de Burisma es muy incómoda para todos nosotros los funcionarios de Estados Unidos que impulsamos una agenda anticorrupción en Ucrania”.

No obstante, en la misma comparecencia para el juicio político contra Trump, Kent agregó: “Déjenme ser claros: sin embargo, no fui testigo de ninguna iniciativa de ningún funcionario de Estados Unidos de cubrir a Burisma del escrutinio. En efecto, yo y otros funcionarios de Estados Unidos defendimos de forma consistente que se restituyera una frustrada investigación de Zlochevsky, el fundador de Burisma, así como que se hicieran responsables de sus acciones a los fiscales corruptos que cerraron el caso”.

¿Presionó Joe Biden, cuando era vicepresidente y en sus gestiones en Ucrania, para la destitución del fiscal general de ese país Viktor Shokin y así proteger a su hijo Hunter Biden?


Esto es engañoso, porque Biden, en efecto, dio un ultimátum al gobierno de Ucrania para que destituyera a Shokin. Pero la Unión Europea también apoyó su remoción, por considerar que era blando en sus investigaciones por corrupción. Y el que fue adjunto de Shokin dijo que las averiguaciones a la empresa Burisma y a su dueño estaban archivadas cuando destituyeron al fiscal general.

Es cierto que Joe Biden le advirtió a la dirigencia de Ucrania, en marzo de 2016, que Estados Unidos retiraría una garantía de crédito de $1 mil millones si no combatían la corrupción y removían al fiscal general de ese país, Viktor Shokin, quien estaba en el cargo desde 2015. El Parlamento de Ucrania destituyó a Shokin el mismo mes del ultimátum de Biden.

Pero además es cierto que otras instancias internacionales y multilaterales presionaron para la remoción del fiscal general, por considerar, dicen esas versiones, que era blando con los casos de corrupción de altos funcionarios de gobierno.

En un chequeo, FactCheck.org recuerda que Biden “alardeó” él mismo de lo que le dijo al gobierno ucraniano. En enero de 2018, contó ante el Consejo de Relaciones Internacionales que había recibido el compromiso del presidente Petro Poroshenko y del primer ministro Arseniy Yatsenyuk de que tomarían acciones contra Shokin en el combate contra la corrupción. “(…) Salían a una conferencia de prensa. Les dije, no, no voy o no les vamos a dar los 1 mil millones de dólares. Ellos dijeron, no tienes autoridad, no eres el presidente. El presidente dijo… yo les dije, llámenlo. Dije, les estoy diciendo, no van a recibir los 1 mil millones de dólares (…). Me voy a ir en... creo que eran seis horas. Los miré y les dije: me voy en seis horas. Si no despiden al fiscal, no van a recibir el dinero. Bueno, son of a bitch, lo despidieron”.

La entonces directora del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde había dicho también en febrero de 2016 que retirarían $40 mil millones de un programa de rescate al joven gobierno de Ucrania a menos que combatiera la corrupción.

La Unión Europea (UE), por su parte, apoyó la remoción de Shokin. Cuando el Parlamento de Ucrania lo destituyó, el enviado de la UE a Ucrania celebró la decisión y dijo: “Todavía hay una carencia de resultados tangibles en casos serios, así como investigaciones de funcionarios de alto nivel dentro de la oficina del fiscal general”.

Que la presión para la remoción del fiscal general Viktor Shokin fue un esfuerzo multilateral, e incluso bipartidista dentro de Estados Unidos, es el argumento de los demócratas y la campaña de Biden para indicar que el vicepresidente no dio el ultimátum a Ucrania para proteger a su hijo Hunter Biden, quien tenía una silla en la junta a empresa ucraniana de gas natural Burisma desde 2014. El fundador y dueño de Burisma, Mykola Zlochevsky, además exministro de Ecología de Ucrania, estuvo siendo investigado en ese país por enriquecimiento ilícito y corrupción.

El informe de los senadores republicanos Ron Johnson y Chuck Grassley habla de Shokin y recuerda el ultimátum de Joe Biden para su destitución. Pero no da pruebas de que el entonces vicepresidente lo hubiera dado para salvar a Harper Biden en Burisma.

The Hill recuerda en un artículo que el propio senador republicano Ron Johnson había reconocido en una entrevista que “el mundo entero reconocía” que Shokin no estaba haciendo un buen trabajo.

Hay, por otro lado, versiones contradictorias sobre si Shokin investigaba a Mykola Zlochevsky y a Burisma cuando lo destituyeron.

El documento de los senadores republicanos sostiene que sí, usando como base en sus notas de pie de página una historia de The New York Times. Pero lo que dice ese artículo textualmente es: “La oficina de Shokin tenía la supervisión de investigaciones a Zlochevsky y sus negocios, incluyendo Burisma. Algunos en el gobierno de Obama apoyaron las investigaciones, pero se preocuparon de que Shokin no las estaba llevando a cabo. Lo acusaron de hacer la vista gorda con la corrupción en su oficina y en la élite política”.

Según la agencia ucraniana Unian, Shokin afirmó que lo obligaron a firmar una carta de renuncia “por una investigación contra funcionarios de Burisma”. “Sugirió que Burisma Holdings Limited tenía el apoyo de Estados Unidos”, dice la nota.

Sin embargo, el que fue adjunto de Viktor Shokin, Vitaliy Kasko, declaró a Bloomberg que, aunque en efecto Shokin había investigado a Burisma, las averiguaciones tenían ya tiempo en pausa para el momento de la remoción del fiscal general. “No hubo presión de nadie de Estados Unidos para cerrar casos contra Zlochevsky [el dueño de Burisma]. Los fiscales ucranianos los archivaron en 2014 y durante 2015”.

¿Recibió Hunter Biden $3,5 millones de Elena Baturina, antigua esposa del exalcalde de Moscú?


El presidente Trump aseguró que sí durante el debate. También lo había dicho en una conferencia de prensa el 27 de septiembre. Se basaba en la investigación de los senadores republicanos Ron Johnson y Chuck Grassley, que sin embargo no prueba que Hunter Biden haya recibido ese dinero a título personal.

El informe dice con palabras textuales que Hunter Biden recibió “un giro bancario de $3,5 millones" de Elena Baturina, una empresaria rusa que había sido esposa del exalcalde de Moscú, Yury Luzhkov, quien murió en 2019. Pero el mismo informe de los senadores precisa también que la transferencia la hizo Baturina a una firma de inversión “cofundada por Hunter Biden" llamada Rosemont Seneca Thornton, constituida en 2013. La fuente para esa información es un “documento confidencial”, según el cual esa cantidad se ingresó a una cuenta bancaria de Roseman Seneca Thornton LLC, el 14 de febrero de 2014, por los servicios del “Acuerdo de Consultoría DD12.02.2014".

Un extenso perfil de The New Yorker sobre Hunter Biden cuenta que él, Devon Archer y Christopher Heinz se asociaron para fundar una empresa con otro nombre, la Rosemont Seneca Partners, en 2009. En junio, cuatro meses después de que Joe Biden se hiciera vicepresidente de Estados Unidos.

En una verificación de datos de Politifact sobre este caso, comentan que la sociedad con Thornton, “aunque usa el nombre de Rosemont Seneca, podría existir sin que otros socios de Rosemont Seneca tenga una participación. Un socio pudo haber creado esta entidad por su cuenta”.

El informe de los senadores Johnson y Grassley agrega luego que en la página web de Thornton Groups hay fotos de Hunter Biden en diferentes eventos, y que Rosemont Seneca Partners “está entre su lista de alianzas y clientes”. Sin embargo, no aporta evidencias que demuestren que Biden cofundó Rosemont Seneca Thornton.

El abogado de Hunter Biden, George Mesires, declaró a Politifact, a NBC News y a Politico que es falso que su cliente haya recibido los $3,5 millones.

“Hunter Biden no tenía interés y no fue cofundador de Rosemont Seneca Thornton, así que la afirmación de que le pagaron $3.5 millones es falsa”, publican la misma cita los dos primeros. A Politico le dijo el abogado que el reporte de los senadores republicanos “alega falsamente que Hunter Biden tuvo una relación financiera con la empresaria Yelena Baturina y que recibió $3.5 millones de Baturina”.

Pero, como apunta Politifact, Mesires tampoco aportó documentos que prueben que Hunter Biden no cofundó esa empresa.

¿Cuánto dinero ingresó Hunter Biden en su posición en la junta directiva de Burisma?


Hunter Biden, el hijo menor de Joe Biden, abogado, con ninguna experiencia en el campo energético, entró en la junta directiva de Burisma en 2014. Burisma se presenta como una de las productoras de gas natural más grandes de Ucrania.

Su socio en la empresa Rosemont Seneca Partners, Devon Archer, había conocido al fundador y dueño de Burisma, Mykola Zlochevsky, en un viaje a Kiev, buscando inversionistas para una empresa de bienes raíces de la que Archer era propietario, según el perfil de The New Yorker. Meses antes que Hunter Biden, Archer había entrado en la junta directiva de Burisma, dice el artículo.

El hijo de Biden siguió en la junta directiva de esa compañía hasta 2019.

Una nota de The New York Times revela que Hunter Biden llegó a ganar $50,000 dólares al mes en algunos pagos. Bloomberg reitera la cifra, atribuyéndola a un registro judicial.

Otro reportaje de Reuters, con mucha investigación periodística in situ, informa que tuvo acceso a registros de pagos de la empresa, que revisaron dos antiguos funcionarios policiales de Ucrania no identificados con sus nombres y apellidos (uno de ellos les dijo que fiscales de Ucrania obtuvieron esos registros en investigaciones a Burisma y su fundador, previas a la contratación de Hunter y Archer). Los registros dicen que Burisma pagó $3.4 millones a Rosemont Seneca Bohai LLC entre abril de 2014 y noviembre de 2015. Esta compañía, como se ve, tiene un nombre diferente a las que hemos mencionado en esta verificación.

Durante 18 meses, continúa la nota de Reuters, Burisma hizo dos pagos de $83,333 al mes a esa empresa por “servicios de consultoría” y agrega, citando a sus fuentes, que uno de esos pagos se le dio a Biden y otro a Archer. Pero Reuters acota que no pudieron verificar estos datos de forma independiente.

El abogado George Mesires escribió en Medium que Hunter recibió una compensación por su trabajo en Burisma. “Como todos los directores, a Hunter lo compensaron por sus servicios en la junta directiva”, escribió en ese texto de octubre de 2019 en nombre de su cliente. Pero no dijo cuánto dinero ganó.

Esta verificación de datos forma parte del convenio FactChat, coordinado por la International Fact-Checking Network (IFCN) con el apoyo de WhatsApp. El objetivo del proyecto es llevar mejor información en español durante las elecciones presidenciales de los EEUU en 2020. Este y otros chequeos políticos los puedes recibir directo por WhatsApp haciendo click aquí o registrando el número +1 727-477-2212 y escribir "Hola". Te esperamos.

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