Boeing paga a Alaska Airlines una compensación inicial de $160 millones por el incidente del panel desprendido de un 737 Max 9
Alaska Airlines dijo que recibió de Boeing 160 millones de dólares como “compensación inicial” por un panel que se desprendió de un 737 Max 9 en enero. La aerolínea agregó el jueves que espera una compensación adicional, cuyos términos "son confidenciales".
El pago busca cubrir la pérdida antes de impuestos de Alaska Airlines, incluido el costo de volver a poner en servicio su flota de 737 Max 9 después de que los aviones estuvieron en tierra durante tres semanas.
Alaska Airlines explicó a la Comisión del Mercado y Valores que tras el incidente de enero, el bloqueo de los 737 MAX 9 se alargó hasta febrero e inmediatamente después tuvo algunos problemas en las reservas de vuelos.
El incidente sucedió el pasado 5 de enero, cuando un panel que tapa un espacio dejado para una salida de emergencia adicional se desprendió mientras un Alaska Max 9 volaba a 16,000 pies sobre Oregon. Los pilotos pudieron aterrizar de manera segura y nadie resultó herido.
Alaska rápidamente puso en tierra sus otros Max 9, y la Administración Federal de Aviación (FAA) siguió dejando en tierra todas las unidades de ese modelo en Estados Unidos, lo que afectó a Alaska y United Airlines.
United también podría recibir pagos
La FAA y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte están investigando, y el Departamento de Justicia está examinando si el incidente violó los términos de un acuerdo que Boeing alcanzó en 2021 para evitar un proceso penal por supuestamente engañar a los reguladores que certificaron los aviones Max para vuelos.
La presentación de Alaska podría presagiar pagos de Boeing a otros clientes por la suspensión de vuelos y los retrasos en la producción y entrega de nuevos aviones. United está pidiendo a los pilotos que se tomen un tiempo libre no remunerado el próximo mes —una solicitud que, según la aerolínea, podría extenderse hasta el otoño— debido a los retrasos en la obtención de nuevos aviones que encargó a Boeing.
Alaska dijo en la presentación del jueves que espera perder entre $1.05 y $1.15 por acción para el trimestre enero-marzo, con 95 centavos por acción de la pérdida relacionada con el incidente. Según una encuesta de FactSet, los analistas esperaban una pérdida de 86 centavos por acción.
La aerolínea con sede en Seattle dijo que sin la explosión, sus ganancias del primer trimestre habrían sido mejores que en el mismo período de 2023.
Alaska Airlines dijo que vio una fuerte demanda y una mayor recuperación de los viajes de negocios en la costa oeste.
"Aunque experimentamos algunas cancelaciones tras el incidente y la inmovilización del 737 MAX 9, febrero y marzo terminaron por encima" de las expectativas originales, dijo la aerolínea.
Boeing, el segundo mayor fabricante de aviones comerciales del mundo, vive de nuevo una crisis por una serie de recientes incidentes y su consejero delegado, Dave Calhoun, ya ha anunciado que se apartará del cargo este año.
La empresa lleva cinco años con pérdidas anuales, primero por la crisis desatada al estrellarse dos 737 MAX 8 en similares circunstancias en octubre de 2018 y marzo de 2019, matando a 346 personas, y después por la pandemia de covid-19. E
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