Biden firma la norma que evita el cierre del gobierno federal
El presidente Biden firmó el jueves una iniciativa temporal de gastos, un día antes de que se produjera un cierre de gobierno, con lo que consigue aplazar su disputa con los legisladores republicanos en torno al presupuesto federal para el próximo año, mientras que la ayuda para Ucrania e Israel continúa estancada.
La medida fue aprobada esta semana en la Cámara de Representantes y el Senado, con amplios márgenes bipartidistas, garantiza que el gobierno siga funcionando hasta después de la temporada navideña y da a los legisladores la posibilidad de ganar más tiempo para resolver sus marcadas diferencias sobre los niveles de gastos del gobierno para el ejercicio fiscal actual.
Biden firmó la propuesta en San Francisco, donde se lleva a cabo el Foro de Cooperación Económica de Asia y el Pacífico (APEC).
El paquete de gastos mantiene financiado al gobierno en los niveles actuales durante aproximadamente dos meses más, en lo que se negocia un plan a largo plazo. La legislación establece dos fechas límite para la aprobación de iniciativas de asignaciones anuales: el 19 de enero para algunas agencias federales y el 2 de febrero para otras, por lo que habrá dos fechas en las que se corra el riesgo de un cierre parcial del gobierno.
La medida fue impulsada por el nuevo presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, y no era la primera opción de muchos de los senadores, aunque solo un demócrata y 10 republicanos votaron en contra del plan, ya que este impide la paralización del gobierno.
Al ser aprobado en el Senado, el líder de la mayoría demócrata, Chuck Schumer, dijo que el plan está “lejos de ser perfecto”, pero él lo apoyó para evitar un cierre y porque no contiene “ninguno de los crueles recortes o píldoras venenosas” que querían los republicanos conservadores de línea dura.
Pero la iniciativa tampoco incluye la solicitud de la Casa Blanca de casi 106,000 millones de dólares para asistencia en tiempos de guerra para Israel y Ucrania. Tampoco otorga financiamiento humanitario para los palestinos y otros pedidos suplementarios, como fondos para la seguridad fronteriza. Es posible que los legisladores presten más atención a esa solicitud después del feriado del Día de Acción de Gracias, con la esperanza de negociar un acuerdo.
¿Qué piden los republicanos?
Johnson ha prometido que no respaldará más medidas provisionales. Dijo que la iniciativa temporal abre la puerta a una “lucha” presupuestal con el Senado el próximo año.
La incapacidad del Partido Republicano de la Cámara Baja de presentar un frente unido sobre la legislación de financiación podría socavar la capacidad de Johnson para negociar proyectos de ley de gastos con el Senado, como ocurrió con su predecesor, Kevin McCarthy.
Los republicanos exigen que el Congreso resuelva la financiación del gobierno a través de 12 proyectos de ley separados, como lo requiere el proceso presupuestario, pero hasta ahora el liderazgo de la Cámara Baja se ha visto obligado a retirar dos de esos proyectos de ley, mientras que vio otro rechazado en una votación procedimental.
Una idea que flota entre los republicanos es vincular directamente los niveles de financiación de Ucrania con la disminución del número de cruces fronterizos ilegales. Mostró cómo incluso los partidarios de larga data de la defensa de Ucrania contra Rusia están dispuestos a retrasar la financiación para obligar al Congreso a abordar un tema que ha desconcertado a generaciones de legisladores: la política fronteriza de Estados Unidos.
Mira también:
