Giuliani se declara en bancarrota luego de que le ordenaron pagar "inmediatamente" $148 millones a dos mujeres que difamó
El exabogado de Donald Trump Rudy Giuliani, se declaro en quiebra horas después de que la jueza federal que presidió el caso por difamación intentado por dos trabajadoras electorales de Georgia, le ordenó pagar los $148 millones que el jurado había acordado como indeminización a las demandantes.
Giuliani presentó documentos en una corte de Nueva York solicitando la protección de sus bienes.
En la solicitud el exalcalde declaró deudas por el orden de $500 millones y activos de solo $10 millones, después de que la jueza federal Beryl A. Howell ordenara el pago inmediato del veredicto, basada en ls que consideró como un gran peligro de que Giuliani ocultara sus bienes de Ruby Freeman y su hija Wandrea ArShaye “Shaye” Moss, las trabajadoras electorales acusadas falsamente por él de ayudar a robar las elecciones de 2020.
La protección ofrecida por una declaratoria de quiebra no cubriría a Giuliani en el caso de difamación
Pero la protección del proceso de quiebra podría no beneficiar a Giuliani en el caso de las trabajadoras electorales de Georgia. Según la ex fiscal federal y profesora de derecho de la Universidad de Michigan Barbara McQuade, las acciones dolosas con intención, como la difamación, no se pueden poner a un lado en los procesos de quiebra por lo que la maniobra de Giuliani no lo protege del fallo de Howell.
McQuade dijo a Salon que la declaratoria de quiebra no protegería a Giuliani quien seguiría estando obligado a cumplir con la deuda. Según la jurista Freeman y Moss podrían obtener órdenes de la oficina del secretario del tribunal para "embargar cualquier salario y gravar sus propiedades” a fin de que reciban las ganancias de cualquier venta.
"Giuliani nunca ha negado haber tomado medidas para ocultar sus bienes de sus acreedores, y no ha ofrecido ninguna promesa afirmativa de que no tomará medidas para hacerlo", escribió Howell, quien dijo además que teniendo en cuenta lo que el jurado escuchó sobre su “pasada y continua difamación de las dos mujeres, el fallo fue conservador”. Para Howell es poco probable que Giuliani logre que el veredicto del jurado de la semana pasada sea anulado o reducido en la apelación
La orden de Howell significa que los abogados de Freeman y Moss no tienen que esperar los habituales 30 días para empezar a intentar confiscar los bienes de Giuliani.
Durante el juicio, el abogado de Giuliani dijo que los $43 millones que pedia la demanda debían ser considerados como un “equivalente civil de la pena de muerte” y un veredicto que otorgara tal suma “sería el fin del señor Giuliani”.
Después de deliberar por un poco más de 10 horas el jurado emitió un veredicto por más del triple de esa cantidad. El veredicto del jurado solo decidió la cantidad que recibirán las demandantes ya que la jueza había dictaminado antes del juicio que Giuliani había difamado a las dos mujeres.
Durante el juicio Giuliani ignoró varias órdenes para proveer información sobre sus finanzas, por lo que la juez dijo que el acusado no pudo demostrar con pruebas documentales o de otro tipo que no puede pagar al menos una parte de la fuerte multa.
La jueza notó que “Giuliani posee propiedades en Nueva York y Florida y tiene varias cuentas bancarias por lo que en su opinión las afirmaciones de penuria de Giuliani “son difíciles de conciliar con el hecho de que Giuliani cuenta con un portavoz que lo acompañó diariamente al juicio”.
Los riesgos y penalidades contra Giuliani siguen en aumento
Howell también sancionó a Giuliani por no haber entregado la información financiera exigida sin ni siquiera ofrecer una excusa, ordenándole pagar los honorarios legales de las demandantes.
Freeman y Moss demandaron nuevamente a Giuliani el lunes por haber repetido comentarios difamatorios sobre ellas, cuya falsedad había sido admitida por su abogado ante el tribunal.
Los abogados de Giuliani dijeron el martes que no era necesario que la corte ordenara el pago inmediato de la cantidad decidida por el jurado ya que si su cliente “tuviese intenciones de fugarse o transferir activos de manera fraudulenta, aún tiene tiempo suficiente para hacerlo”. Howell calificó el alegato de “descarado” y “no persuasivo”.
La jueza descartó el pedido del abogado de Giuliani de que le fuese concedido tiempo para apelar el veredicto antes de pagar el monto del fallo ya que en su opinión tal petición es irrazonable ya que dificilmente podría convencer al tribunal de que se le permita apelar sin pagar primero una fianza equivalente a la sentencia.
