Solo el 3.5% de estos animales mueren por accidentes con botes, marea roja, frío o causas naturales. Expertos aseguran que hasta la fecha han muerto unos 1,017 ejemplares debido al hambre. Estos mamíferos acuáticos se alimentan durante los meses cálidos para luego refugiarse en invierno en zonas de aguas templadas. El problema radica en que la hierba marina ha desaparecido hasta un 80% por la actividad humana.