De acuerdo con un informe preliminar del Instituto de Investigación Científica y Peritaje Forense de Kiev, tras un devastador ataque ruso el pasado 7 de febrero contra la capital ucraniana, se recuperaron escombros del proyectil, que apuntan a haber formado parte de un misil de crucero hipersónico Zircon, que podría ser el más rápido del mundo.