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Autismo

Caminar en puntas de pie: 9 señales de autismo que ningún padre debería ignorar

Publicado 2 Abr 2019 – 12:31 PM EDT | Actualizado 11 Nov 2020 – 09:46 AM EST
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El trastorno del espectro autista (TEA) aparece comúnmente en los primeros años de vida. Antes se creía que era un trastorno infantil; ahora se sabe que la condición acompaña a las personas durante toda la vida. Diagnosticar el autismo de manera temprana es crucial para el desarrollo del niño a largo plazo.

Autismo en niños: 9 señales

Autism Family es un canal de YouTube creado por un padre y una madre con 3 niños diagnosticados con autismo en su hogar. A través de este emprendimiento, esperan ofrecer información útil para los padres y las madres que estén en una situación como la suya. Uno de sus videos más populares contiene una serie de signos del autismo en niños, explicados en profundidad, con el ejemplo de sus propios hijos.

Es importante recordar que solo por que tu hijo tenga estos signos, eso no significa que tenga este trastorno. Sin embargo, cuanto más frecuentemente se repitan estos comportamientos, más deberías preocuparte por conseguir un diagnóstico.

1. Aletear las manos

La mayoría de los niños tiene este comportamiento durante los primeros años de vida. Hasta los 3 años, aletear las manos de manera repetitiva es normal. Los niños con TEA seguirán repitiendo esta conducta más allá de ese umbral.

Esta es una forma de autoestimulación, un tipo de conducta que los niños autistas realizan cuando hay demasiada estimulación sensitiva en el entorno. Como resultado, se concentran en una sola sensación. Hay muchas más de estas conductas, e incluyen estímulos visuales, táctiles, sonoros, de movimiento, entre otros.

2. Golpear su cabeza

Como forma de autoestimulación, los niños autistas pueden participar en una conducta repetitiva más dañina: golpear su cabeza contra superficies. Para frenar este comportamiento, es útil distraer a los niños con algún otro estímulo. La mayoría de las veces es necesario retirarlos de la situación inmediatamente, por más que protesten, porque pueden llegar a golpearse muy fuerte. Algunas personas se ven obligadas a comprar cascos para sus niños por esta razón.

3. Berrinches sin razón

No hay padre o madre que no haya sufrido a su niño protestando en público, llorando muy fuerte, gritando, si no obtiene lo que quiere. La diferencia aquí está en que los niños autistas suelen hacer berrinches no porque quieran algo, sino por la sobrecarga de estímulos que suelen sufrir en lugares públicos.

Si a un niño autista se le da lo que quiere, no dejará de llorar ni patalear, y ese es el signo ante el cual los padres deben estar atentos. No es recomendable rendirse ante las protestas de un niño, salvo en casos aislados, en los que la reacción del infante puede resultar informativa. En niños autistas, estos berrinches pueden durar horas.

4. Falta de respuesta

Cualquier niño ignora a sus padres de vez en cuando, pero aquellos con TEA no lo hacen conscientemente, sino que se puede notar que están en su propio mundo. A veces, esta señal lleva a los padres a creer que el niño tiene problemas de audición, pero, en niños autistas, la falta de respuesta tiene más que ver con estar distraído, retraído, que con no escuchar. Las personas autistas escuchan demasiado y les es difícil filtrar los sonidos para diferenciarlos.

5. Agresividad extrema

Todos los niños se pelean entre sí o con sus padres, de maneras violentas, en determinados momentos. Los niños autistas suelen hacerlo como si lo estuvieran disfrutando, explica el video de Autism Family. Incluso pueden agredirse a sí mismos.

De acuerdo a Raising Children, una organización respaldada por el gobierno australiano, los niños autistas pueden agredirse a sí mismos o comportarse agresivamente, con adultos o con otros niños, por las siguientes causas:

  • no entienden lo que está pasando a su alrededor (las señales no verbales de otros);
  • no pueden comunicar sus deseos o necesidades;
  • están muy ansiosos o tensos;
  • tienen la necesidad de estimularse a sí mismos, debido a una sobrecarga sensorial;
  • quieren escapar de situaciones o actividades estresantes para ellos.

6. Obsesión con objetos

En el ejemplo del video, el padre habla de una obsesión con verter líquidos de un vaso a otro, que es común en niños con autismo. A todos los niños les gusta jugar con líquidos, pero en niños autistas estos juegos pueden convertirse en una obsesión, llegando a durar horas, dependiendo de la gravedad de la condición.

Hay una diferencia esencial, y es que los niños autistas están en su propio mundo, en lugar de estar intentando llamar la atención con el juego.

7. Evitar mirar a los ojos

Uno de los signos más conocidos de autismo es el de evitar el contacto visual. Cada persona autista tiene razones distintas para evitarlo, pero parece ser un signo común en la mayoría. Usualmente este signo persiste toda la vida, incluso en la adultez.

8. Caminar en puntas de pie

Todos los niños han intentado alguna vez caminar en las puntas de sus pies. Debes prestar atención a qué tan seguido se repite esta conducta para diferenciar un comportamiento común en niños neurotípicos de un signo de autismo.

9. Falta de comunicación y lenguaje

Si tu niño está usando pocas palabras a la edad de tres años o más, esto puede ser un signo de autismo. La falta de habla no necesariamente está presente en todos los niños autistas, pero eso no significa que sepan comunicarse. Muchas veces repiten constantemente la misma palabra o la misma frase por mucho tiempo, no porque la estén aprendiendo, sino «como un disco rayado», explica el padre en el video.

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