Más de 500,000 trabajadores de comida rápida están entusiasmados por el aumento salarial que aprobó el gobernador de California, Gavin Newsom, con la ley AB-1228, pues aseguran que gracias a este incremento la calidad de sus vidas mejorará. “Es algo muy significativo, mis hijas ahora van a poder gozar un poco más de tener sus tres alimentos al día, podré pagar mis facturas y podré ayudarle a mi esposo con la renta”, dijo Laura Pozos, empleada.