Franklin Izaguirre, de 17 años, fue el primero en notar que su vivienda se estaba incendiando, por lo que alertó de inmediato a su familia; sin embargo, él no logró escapar de las llamas. Misael Izaguirre, padre del joven, tuvo que ser internado debido a las quemaduras que sufrió. La casa de esta familia quedó totalmente destruida y ahora no solo enfrenta el fallecimiento de un ser querido, sino las dificultades de seguir adelante después de perderlo todo.